De piropos y PIROPOS!

Estaba ayer cocinando pasta para mezclar con mayonesa y jamón y cuando estoy sola en casa y nadie me contradice o me molesta empiezo a entrar en ese estado IDO.
Mientras escurría los tallarines me puse a pensar en los piropos. Bueno en realidad pensaba en mi vida en Guayaquil como estudiante, los días cuando tenía que salir con millón cosas en la mochila y regresaba a casa muerta del cansancio y con hartos deberes por hacer.
Entonces ustedes saben que las ideas vuelan y de una cosa uno se vá a otra y es así que llegué al tema de los piropos.
Cuando vivían aún en Ecuador este era tema candente porque con cualquiera que hablara terminaba dándole golpes ( mentira) si no estaba de acuerdo conmigo en que en Ecuador no existen piropos sino babosos que creen que dicen piropos.
Cuando era bien jovencita y aún estudiaba en el colegio de monjitas nunca tuve problemas con babosos porque bueno vamos a ser sinceros aquí en este punto. Yo era digamos feita, o sea bueno seamos incluso hoy día un poco más que sinceros, yo era horrible!
Por un lado esto me aventajaba bastante porque mientras mis amigas hablaban de los babosos en los buses, en las fiestas y etc etc yo andaba bien tranquila porque a mi nadie se me acercaba.
Luego cuando entré a la Universidad empezó el cansancio y las trasnochadas y empecé a ganar un poco de peso y la ropita ya me quedaba más aceptable. Pues bueno fue ahí cuando comenzó mi calvario.
Y ojo que quiero dejar bien clarecito ( como decía mi abuelito) que yo una belleza no soy. Lo que pasa es que en Ecuador no te hace falta ser una top model para llevarte un buen par de PIROPAZOS :)
Recuerdo una vez cuando iba caminando a la Uni y estaba ya por llegar a la puerta principal, ese día admito que me había puesto brillo labial, sin embargo todo lo demas era lo de siempre, jeans, blusita no sexy, despeinada, zapatos gruesos y cómodos, o sea todo lo contrario a la típica muchacha super femenina con tacones, falditas, blusitas muestra tetas y peinado estrafalario.
Iba yo pues caminando y pasa junto a mí un tipo que visualmente se veía como un baboso de lo último, desgrenado, puerco, o sea casi casi que un pandillero o uno que no tiene donde vivir.
Senores y doctores, me quedé sorprendida. El tipo me dijo un piropo que no había esperado!
"Dios, los angeles estan cayendo, lindura!".
Como siempre yo soy de las que cuando oye cosas asi sale disparada del sitio. Caminé 3 veces más rápido y cuando estuve a salvo pensé en lo que me había dicho y en lo que yo antes había pensado del sujeto. Me dió pena, quizás no era tan malo como yo había pensando. Y quizás nunca lea esto pero ese ha sido uno de los piropos más bonitos que me han dado junto a otro muy peculiar que me ocurrió cuando estaba cerca del registro civil en la ciudad de Quito.
Iba yo cabreada por no se que cosa y un tipo apoyado en un carro empieza a taraear la canción de Pretty Woman. La han oído? Yo pensaba que estaba cantando no más y cuando le regreso a ver me doy cuenta que el tipo estaba que me comía con los ojos! ay que descaraooooo! :)
Bueno horrible no estaba para que voy a mentir pero tampoco que bestia que bruto de hermoso.
Si nos ponemos a pensar han habido casos y CASOS, no todos han sido buenos, algunos han sido chistosos, como cuando yo viví en Quito alguna temporada y tenía que pasar por la calle Amazonas y ahi mismo estaban repintando un edificio y habían trabajadores subidos y una vez que pase me chiflearon durísimo y yo esta vez si que me reí en sus caras, es que de verdad me pareció tan gracioso!
En cambio recuerdo con asco una vez que iba llegando a mi casa y cruzaba un centro comercial que esta así al aire libre y un tipo se me acerca tanto pero tanto que casi me coge y me dijo unas asquerosidades que ni valen la pena ponerlas aquí, yo se que ustedes ya se imaginarán o en los peores de los casos, también les habrá pasado.
La típica pitada también me ha pasado sólo con la diferencia de que la calle estaba medio vacía y yo iba cargadas de libros y cosas de pinturas y el tipo seguía pitando descaradamente y me decia atrocidades por la ventana. Ahí si que me dió miedito.
Pero cuando estuve a punto de orinarme del susto fue justo un mes antes de irme para Alemania. Venía algo contrariada y estaba cerca del Policentro esperando un bus que me lleve al centro para hacer no se que cosa que ya no recuerdo bien, tenía que ver con papeleos para la visa alemana etc.
Se me acerca un tipo bien feo y me pregunta si por ahí pasaba la línea 94.
Le dije que creía que no sabía pero era tarde el tipo tenía el plan de hacerse mi mejor amigo :)
Incluso creo que escribí un post sobre esto pero ay de solo recordarlo me da cosas.
Cuando llegué a Europa estaba tan concentrada en hacerme parte de la sociedad que ni me percaté de que aquí los piropos son bueno mejor dicho NO SON.
Veamos, en Alemania, creo que a duras penas una vez un tipo en un bus me miraba. Bueno, eso para ser Alemania es HARTO! :)
Es que los alemanes no hablan, no se expresan salvo salvo que ya te conozcan o te hayan presentado terceras personas, sino creeme muchacha o mujer que me lees que estas bien jodida! :)
Sinceramente a parte de las "miraditas" medias babosas nunca me quejé de algo que me hubieran dicho. Ok, al inicio se debe tener en cuenta que mi noción de aleman no era muy buena así que puede que me hayan dicho algo y yo juraba que eran los buenos días ;)
Si Alemania era casi nula en piropos, entonces déjenme decirles que Dinamarca si era ya el colmo. Sólo recuerdo una vez que me maquillé bonito y me puse mis super botas y mi abrigo largo y salí a pasear del brazo de mi Chanchito. Cuando ibamos cruzando la esquina había una carnicería y dos tipos fornidos estaban sacando carnes en cajones y llevandolas adentro y yo pase ahí toda perfumadota cosa super rara porque casi nunca uso perfume salvo cuando me acuerdo y entonces pasó el milagro. Uno de los tipos me miro de pies a cabeza y al menos este tuvo la valentía y "amabilidad" de detener sus ojos en mis........ OJOS! cuidado pensarán mal eh.
Le dije insofacto al Chanchito y el me respondió que según la información del mapa habría que primero coger el s.tog que iba en dirección..............
O sea? O sea? si, es lo que estan pensando... mi marido ni me paró bola y menos vió que otro hombre me había visto. Típico de mi marido!
Y ahora en Espana? Pues no se, hasta ahora nadie me ha dicho babosadas y tampoco me han mirado raro. Bueno una vez un viejito si me miró medio raro pero en este caso puede haber sido porque yo iba bien "payasamente" vestida.
En todo caso y para resumir. Que uno nunca esta felíz donde está, que cuando yo vivía en Ecuador cualquier piropo era un insulto. Ahora que ya nadie me dice nada se extranan las babosadas jajajaja.
No se si compartan esta idea algunas mujeres, pero yo personalmente creo que de vez en cuando una miradita pícara, unas palabras bonitas no vienen mal. A mí a veces en Ecuador hasta me subían el ánimo!
Claro está que hay que saber distinguir entre "palabras bonitas" y "palabrotas asquerosas". Estas últimas en vez de subir el ánimo hacen dar rabia, uno siente que no vale, que es pura carne sin sentimientos, ojalá los hombres que hacen estas cosas entendieran de una vez por todas que así NUNCA van a llegar a una mujer, lo oyeron? NUNCA!